Moverse por fe requiere de una actitud atrevida frente a los desafíos de la vida
Deberíamos poder distinguir entre el paraíso que prometió Jesús al ladrón colgado de la cruz y el reino de Dios.
¿A qué se refiere la enigmática frase, «venga tu reino», en la oración que Jesús enseñó a sus discípulos?
El llamado a buscar primeramente el Reino es, ante todo, un llamado a devolverle a la vida esa inocente perspectiva que tan escurridiza le resulta al hombre caído.
Dios nos invita, en Cristo, a recuperar nuestra vocación de ejercer dominio sobre la tierra.